El caso de Jasiel Giovanny, un niño de ocho años desaparecido el 2 de julio en el fraccionamiento San Agustín de Chihuahua, ha conmocionado a la comunidad. El menor fue visto por última vez jugando en un parque cercano a su casa. Tras un operativo de búsqueda con apoyo de unidades caninas y personal de la Fiscalía General del Estado (FGE), su cuerpo fue hallado sin vida en un lote baldío a 300 metros de su domicilio, dentro de una bolsa de plástico. La necropsia reveló que murió por insuficiencia respiratoria causada por múltiples heridas de arma blanca, una de las cuales perforó un pulmón.
La FGE abrió una carpeta de investigación por homicidio y detuvo a Alejandro F.D., padrastro del menor, por omisión de cuidados. Él estaba a cargo del niño mientras la madre trabajaba. Según reportes, Alejandro fue una de las últimas personas en tener contacto con Jasiel. La madre del menor declaró que su hijo no solía alejarse y sospecha que fue engañado o forzado a irse.
El crimen ha generado indignación y dolor entre los vecinos, quienes despidieron al pequeño en una emotiva ceremonia en la funeraria Latinoamericana. La investigación continúa con varias líneas abiertas para esclarecer los hechos y determinar la responsabilidad del padrastro u otros posibles implicados.
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